22 Dic POSIBLE FRAUDE ELECTORAL EN ESTADOS UNIDOS
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Ha pasado mes y medio desde las elecciones en Estados Unidos. Los extraños sucesos que se dieron durante ese proceso deben investigarse antes de afirmar que Biden ganó, porque es probable que se haya cometido fraude. Y es que hay mucho en juego. La poderosa izquierda norteamericana quiere recuperarse del retroceso sufrido en sus “logros” (aborto, ideología de género, restricciones a la libertad religiosa, etc.) tras su inesperada derrota en 2016.
La parcialidad mediática ha hecho creer a muchos que Biden es el ganador indiscutible. Incluso el New York Times se aventó la puntada de nombrar al dúo Biden-Harris como “personas del año”, que por “cambiar la historia estadounidense, por mostrar que las fuerzas de la empatía son mayores que las furias de la división, por compartir una visión de curación en un mundo en duelo”. Bellas palabras, pero que suenan más que nada a una designación ex profeso con jiribilla política.
Algunas cadenas televisivas llegaron al extremo de cortar la transmisión del discurso de Donald Trump tras las elecciones en donde cuestionaba la autenticidad del proceso. Hacerle esto a un presidente es una grosería, una grandísima falta de respeto.
Trump fue durante años muy popular en los medios, sobre todo por su programa “El Aprendiz”. Pero desde que se lanzó como candidato “conservador”, los medios comenzaron a atizar en su contra, llegando en una ocasión hasta el ridículo punto de publicar un artículo donde se le critica porque cuando come bisteck, le gusta ponerle cátsup. Estar contra Trump fue convertido en algo “políticamente correcto” por los medios.
Estos hablan mucho, pero hoy básicamente sólo dicen dos cosas: que Biden ganó y que Trump no lo quiere aceptar. No informan acerca de las irregularidades en el proceso electoral ni la correspondiente denuncia ante la Corte. Pero, insisto, sí hay hechos que merecen investigarse, como la sospechosa derrota de último momento de Trump en cuatro estados clave (Wisconsin, Michigan, Pensilvania y Georgia) donde prácticamente ya la tenía ganada, o declaraciones juradas de aparentes chanchullos para favorecer a Biden, o reportes de votos por correo de gente ya fallecida (a menos que realmente haya votantes de hasta 110 años de edad), y “convenientes fallas” en el software utilizado.
Aquí en México, por los antecedentes de fraudes en el siglo pasado, y en general por la cultura de la tranza, el proceso electoral se basa en la desconfianza, por lo que toda la votación tiene que ser en persona y el conteo a mano. La labor de los funcionarios de casilla, desde la instalación de las mismas hasta el resultado del conteo, es muy vigilada por representantes de los partidos y por observadores nacionales e internacionales.
En Estados Unidos, donde no hay tanta corrupción y se supone que todo se hace apegado a la ley, además de depender más del software, el proceso electoral es un poco más relajado en sus controles y esto permite al menos alguna brecha por donde se podrían cometer actos fraudulentos, como en los votos por correo, que por cierto son parte fundamental de los alegatos del equipo legal de Trump.
Mi hermana y su esposo, quienes viven en Georgia, se vieron en la necesidad de poner un reporte, ya que fungieron como observadores del conteo de votos por correo recibidos desde el extranjero, de los cuales el 99% -prácticamente todos- eran a favor de Biden, lo que por supuesto no puede ser real, sobre todo si parte de esos votos eran de militares, quienes tienden a votar por candidatos republicanos (en 2016, el 60% de los militares votaron por Trump y sólo el 34% por Clinton).
Por otro lado, AMLO causó indignación a muchos en México y Estados Unidos por negarse a reconocer a Biden como presidente electo hasta que fuera ratificado por las instancias correspondientes. Personalmente no apruebo la gestión de AMLO, pero en esto sí estuve de acuerdo con él. Al ganador no lo declaran los medios, sino las autoridades electorales. Y en este caso no lo han hecho porque hay demandas pendientes. Como en el año 2000, cuando Al Gore fue llamado “presidente electo” durante 30 días, hasta que la Corte declaró a George Bush como ganador. Lástima que AMLO finalmente terminó doblando las manos y felicitó a Biden antes de tiempo.
Ojalá que se aclare todo este asunto. Mientras tanto, si me preguntan mi opinión al respecto, diría que no me consta, pero a mi juicio, por lo que veo, diría que sí, efectivamente, se cometió fraude electoral.
Por último, cambiando de tema, ¿se imagina usted una celebración de cumpleaños donde nadie se acuerda del cumpleañero? La navidad es mucho más que regalos y reuniones familiares. Es la celebración del nacimiento de Cristo. No dejemos de hacer algo para recordarle. Y mientras tanto, ¡FELIZ NAVIDAD Y AÑO NUEVO PARA TODOS USTEDES! Y que al ingeniero Guillermo Moreno Ríos le vaya bien en su candidatura a la rectoría de la Uni-Son. Qué gran oportunidad para esta de volver pronto a la normalidad, bajo la batuta de alguien que sabe de resiliencia.
Carlos Martín Quintero Orcí
Puntos curriculares:
*Arquitecto con experiencia en todo tipo de proyectos.
*Colaborador de INCIDE desde el 2001.
*Historiador aficionado de la ciudad de Hermosillo.
*Escritor en diferentes medios acerca de diferentes temas.
*Fotógrafo del paisaje y de la construcción.
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